Hace tiempo que compre nesquik de fresa por curiosidad; la verdad es que ni sabía de su existencia, aunque parece ser más viejo que carracuca.
Lo compré vía online, y cuál fue mi sorpresa cuando después lo veía en todos los supermercados a los que acudía a hacer compras.
Me parecía que llevaba demasiado tiempo en el armario de la cocina esperando a que le diera algún tipo de uso, y se me ocurrió hacer unos cupckaes con él.
Después de mucho indagar por blogs ajenos, me llamo la atención esta receta de Alma y ni corta ni perezosa me puse a ello.
Salieron unos cupcakes con un potente sabor a helado de fresa, muy jugosos y con una buttercream deliciosa; un sueño para lo amantes de este helado.
En principio esta receta sería para 12 cupcakes o 24 mini cupcakes, pero cunde para muchos más; a mi me salieron 24 mini cupcakes y 8 cupcakes al final.
Tengo que decir que una de la variaciones que hice a la receta original, fue quitarle azúcar a la buttercream porque me parecía que iba a salir excesivamente dulce para mi gusto, y la verdad que acerté porque salieron muy ricos.
- INGREDIENTES:
220 gr. de azúcar
2 huevos medianos
220 gr. de harina
1 cucharadita de levadura royal
120 ml. de leche semidesnatada
4 cucharadas de nesquik de fresa
- Para la buttercream:
250 gr. de mantequilla sin sal en pomada
350 gr. de azúcar glass
3 cucharadas de nesquik de fresa
60 ml. de leche semidesnatada
colorante alimentario rosa
Comenzaremos por poner el horno a precalentar a 180º, y poniendo las cápsulas de papel en el molde para cupcakes.
En un vaso disolvemos el nesquik en la leche y reservamos.
Batimos bien la mantequilla con el azúcar (yo lo hago a mano con unas varillas), y luego incorporamos los huevos de uno en uno.
Después añadimos el nesquik de fresa y volvemos a batir bien.
Tamizamos la harina con la levadura y con la ayuda de una lengua de silicona, vamos incorporándola a la mezcla anterior.
Llenamos las cápsulas con la masa resultante y horneamos durante 22-25 minutos los cupcakes y unos 18 minutos los minicupcakes (pincharlos para comprobar).
Una vez horneados los sacamos del horno y los ponemos a enfriar durante unos 5 minutos encima de una rejilla dentro del molde, y después los sacamos del molde a la rejilla directamente, hasta que se enfríen del todo.
Mientras enfrían, hacemos la buttercream; ponemos todos los ingredientes en un bol y con una batidora de varillas eléctrica, batimos muy bien durante unos minutos.
Después de tener echa la buttercream, será el momento de añadirle poco a poco el colorante, hasta conseguir el tono deseado.
Por último, una vez fríos los mini cupcakes o cupcakes, le ponemos la buttercream y decoramos al gusto.
Mini cupcakes listos para comer!!! ;)
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